Para finalizar
nuestra serie de artículos sobre el cuidado de la piel y el cabello en
invierno, te traemos los mejores consejos para poder lucir un cabello sano y hermoso durante
esta estación.
Cabello: brillante y sedoso
El cabello no sufre
tanto por el frío, si no más bien por la sequedad de ésta época del año. Ya que
cuanto menos humedad haya en las fibras contenidas en el interior de cada pelo,
más se separan se deterioran o rompen las escamas que forman la capa exterior o
cutícula del mismo. Esta falta de cohesión en las escamas de la cutícula
capilar hace que los cabellos se enganchen entre ellos, lo cual produce a su
vez una fricción mediante la cual el cabello se maltrata constantemente y se
seca aún más. Si a eso se le suma la electricidad estática, mucho más frecuente
en los meses invernales, el efecto se potencia. Particularmente molesto es que
una vez que aparecen estos daños mecánicos no son fácilmente reparables.
Primero el pelo se vuelve opaco y se tiende a enredar, luego desarrolla puntas
partidas, y puede llegar inclusive a romperse. Por lo tanto, en primer lugar
hay que ocuparse de reparar inmediatamente las pequeñas lesiones del cabello.
Esto es tarea para los ingredientes activos especiales contenidos en champús,
acondicionadores y cremas protectoras Anti-Frizz, que gracias a su carga
eléctrica se anclan a los sitios dañados de la cutícula capilar y la alisan
sistemáticamente, lo que evita daños mayores.
Además, para que el
pelo no se enrede o despeine a causa del viento invernal deberíamos tratar de protegerlo siempre que
podamos con un gorrito suave.
Finalmente, puedes
tomar nota de este tip para cuidar tu cabello mientras está expuesto a
ambientes cerrados y con calefacción como
tu casa u oficina: Abre las ventanas regularmente y así recirculará aire
fresco. Ya que el mejor remedio natural contra el pelo electrizado es la
humedad.